La Guardia Civil investiga a un motorista que circulaba superando más del doble la velocidad permitida
Escrito por Redacción el 2023-02-10
- Fue sorprendido cuando circulaba a 211 kilómetros por hora en un tramo limitado a 80 por señales específicas
- El responsable puede ser condenado a prisión de hasta 6 meses y a la retirada del carnet de conducir hasta 4 años
La Guardia Civil del Subsector de Tráfico de Alicante ha investigado al conductor de una motocicleta que circulaba superando en más del doble la velocidad permitida para el tramo de la vía en la que fue sorprendido. Los excesos de velocidad limitan a los conductores la capacidad de reacción ante un imprevisto. En un accidente de tráfico, los motoristas tienen más probabilidades de fallecer que los automovilistas
Sobre las 16,30 horas del pasado jueves 2 de febrero, cuando la Guardia Civil de Tráfico del Subsector de Alicante se encontraba realizando su labor de vigilancia del tráfico, por medio de un control de velocidad en la carretera CV-86, a la altura del kilómetro 7, a su paso por la localidad de Elche, captaron a un vehículo que circulaba a 211 kilómetros por hora en una zona limitada a 80.
La limitación de la velocidad de la vía en esa zona está claramente especificada en las señales de tráfico.
Los agentes dieron el alto a la motocicleta y una vez identificado el conductor, lo investigaron como presunto autor de un delito contra la seguridad vial, catalogado en el artículo 379 del Código Penal, al haber superado en más de 80 kilómetros por hora el límite permitido de velocidad.
El conductor es un joven de 20 años, de nacionalidad española. Se enfrenta a una condena de 3 a 6 meses de prisión o multa de 6 a 12 meses o a realizar trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días. Además, la condena va asociada a la pérdida del permiso de conducir de 1 a 4 años. Las diligencias han sido puestas a disposición del Juzgado de Instrucción de Elche.
La Guardia Civil desea recordar a los usuarios la importancia de ser responsables durante la conducción. Cumplir las normas de seguridad es una muestra de respeto al resto de usuarios con los que se comparte la vía, y evita poner en riesgo la vida propia y la de los demás. Según los estudios que realiza la DGT, los motoristas tienen más probabilidades de fallecer en un accidente que los automovilistas.