El portavoz adjunto Mariano Valera califica de indignante que se cambien los horarios y calendarios de los centros ocupacionales sin consenso, que se merme la calidad asistencial ante la falta de personal y que exista opacidad en la gestión de las bolsas
El Grupo Municipal Socialista, a través del portavoz adjunto Mariano Valera, ha advertido que el gobierno de Carlos Mazón está trabajando para desmantelar poco a poco los servicios sociales de la Comunidad Valenciana. En concreto, Valera se ha referido a las concentraciones de los trabajadores, las familias y los usuarios de los centros ocupacionales Tramoia, Altabix y Carrús. “Los hemos acompañado porque hay que alzar la voz ante una gestión que está poniendo en riesgo la calidad del servicio y las condiciones laborales de quienes sostienen estos centros con su esfuerzo diario”.
Valera ha afirmado que todos debemos ir juntos para frenar el desmantelamiento de los servicios sociales “que estamos sufriendo desde la llegada del PP al gobierno de la Generalitat, con el aval de VOX”.
Las razones de esta protesta son claras: imposición de calendarios y horarios sin negociación, reducción de la calidad del servicio, falta de personal y opacidad en la gestión de las bolsas de trabajo. Y ante esto, el portavoz adjunto ha manifestado que la respuesta de la administración autonómica “ha sido el silencio. Un silencio que demuestra la falta de sensibilidad y compromiso con las personas con discapacidad y sus familias”.
En el pleno del mes de enero, los socialistas preguntaron al equipo de gobierno municipal si eran conscientes del malestar que estaban generando estos cambios en los centros ocupacionales. “Y la respuesta que obtuvimos en febrero fue una evasiva más: el IVASS siempre escucha. ¿Escucha? Si realmente escuchara, no estaríamos aquí hoy. Si realmente escuchara, no habrían impuesto cambios sin diálogo ni negociación”, ha afirmado Valera.
Retrocesos
El edil socialista ha lamentado que en estos casi dos años de gobierno de PP y VOX “estemos viendo recortes, retrocesos y una falta de planificación que afecta a la dependencia, las rentas, la gestión de los centros y residencias… Y mientras tanto, el gobierno de Mazón y el equipo de gobierno municipal de Elche miran hacia otro lado”.