Las llamas del ‘incendio’ provocado por el anuncio del estudio de viabilidad para la implantación del tranvía en Elche, se han ido apagando con el paso de las horas. A ello ha contribuido el encuentro mantenido por Carlos González y Carlos Mazón, alcalde de Elche y presidente de la Diputación Provincial respectivamente, en el que se ha seguido allanando el camino para que el centro de congresos sea una realidad.

De hablar de un proyecto inconsistente, de falta de respeto institucional e incluso de calificarlo como falacia, se ha pasado a esas “discrepancias razonables y amables” a las que se aludió. No obstante, ambas partes mantienen posturas distintas al respecto a la necesidad o no del estudio.

El presidente de la Diputación mantiene su intención de seguir con la iniciativa, ligándola con la necesidad de cumplir con la deuda histórica que hay con Elche por la compra de los terrenos en los que hoy se encuentra la Universidad Miguel Hernández.

Según indicó Mazón, “si Alicante tiene AVE, cercanías y tranvía, no veo por qué Elche no lo puede tener. Nosotros queremos ponerlo encima de la mesa para reivindicarlo y analizar su viabilidad. Los políticos tenemos que aprender a ejecutar nuestro presupuesto y a reivindicar lo que otras administraciones deben invertir”.

Por su parte, el alcalde Carlos González recalcó que la idea de la ciudad es apostar por las cercanías, con una plan de actuación estudiado y consensuado. “Es lógico que Alicante tenga tranvía para conectarse con las poblaciones que tiene al norte. Pero Elche está conectada por medio de las cercanías con Alicante y con poblaciones como Orihuela o Murcia entre otros. Y hay que perseguir llegar por cercanías al aeropuerto y el parque empresarial”.