Se trata de diagnosticar heridas precozmente en el domicilio para tratarlas con mejores resultados y aumentar la calidad de vida del paciente
El equipo ha obtenido financiación de la Convocatoria UNISALUT de Fisabio, en la modalidad Polisabio-Proyectos de Innovación junto a la Universitat Politècnica de València
El equipo investigador de enfermería de la Unidad de Hospitalización a Domicilio del Hospital General Universitario de Elche está desarrollando un proyecto de innovación cuyo objetivo es llevar a cabo el diagnóstico inmediato de heridas mejorando su precisión y la eficacia del tratamiento.
Este proyecto, titulado Evaluación de Indicadores Predictivos de la Cicatrización de Úlceras por Presión por Ensayos Rápidos (CICAPRED), se lleva a cabo con personal del Instituto IDM, perteneciente al departamento de Química de la Universitat Politècnica de València (UPV). Está gestionado por la Fundación para el Fomento de la Investigación Sanitaria y Biomédica de la Comunitat Valenciana (Fisabio), a través del programa de colaboración UPV-Fisabio llamado Polisabio.
Según ha afirmado la coordinadora de investigación de Enfermería del departamento del Hospital General Universitario de Elche, Esther Soler, “este dispositivo, cuyo objetivo es diagnosticar heridas en los domicilios de los pacientes in situ y tratarlas de manera más precoz y con mejores resultados, podría ser muy positivo en la calidad de vida de los pacientes, en su esperanza de vida y en la reducción de costes sanitarios”.
El origen de esta investigación radica en un proyecto anterior que ya dio muy buenos resultados a la hora de determinar los parámetros hematológicos y bioquímicos que existían en los exudados de las heridas de los pacientes de la unidad, para definir la fase de cicatrización de la herida y así poder aplicar el mejor tratamiento en cada fase.
Este trabajo permitió seleccionar una serie de indicadores que permiten a los profesionales diferenciar si la herida está en una fase inflamatoria y proliferativa y por tanto mejorar el diagnóstico y adecuar el tratamiento. Los primeros resultados de esta investigación han sido publicados en el Journal of Wound Care y más recientemente en AnalyticalChemistry.
Los buenos resultados obtenidos en esta primera fase, financiada previamente por la misma convocatoria UNISALUT y promovida por Fisabio en la modalidad de Acciones Preparatorias, ha permitido que el equipo haya logrado recientemente una nueva financiación de 20.000 euros para continuar avanzando en el desarrollo del proyecto.
Ahora los profesionales van un paso más allá y se encuentran investigando un mecanismo que permita detectar la fase de cicatrización de la herida, agilizar el diagnóstico y mejorar el tratamiento.
Para Esther Soler “algo que nació como una idea en el servicio al detectar una necesidad entre los pacientes de la unidad de Hospitalización a Domicilio, ha ido más allá y se ha convertido en un proyecto de innovación consolidado, muy ambicioso y prometedor frente a un problema que afecta a muchas personas a nivel mundial”.
Heridas y nutrición
Enfermería de la Unidad de Hospitalización a Domicilio del Hospital General Universitario de Elche destaca así por su faceta investigadora e innovadora además de la asistencial.
En ese sentido, la unidad cuenta con un grupo multidisciplinar compuesto por 12 integrantes que tiene varios proyectos de investigación en marcha. El grupo fue creado oficialmente hace 4 años por Salvador Cerveró, enfermero experto en heridas crónicas que tras su jubilación ha dejado paso a Remedios Santoyo, enfermera de la UHD y a Natividad López, facultativa del laboratorio clínico del Hospital de Elche, para continuar la línea de investigación.
El tema principal de investigación de este grupo de profesionales es ‘Heridas y nutrición’ y su objetivo es encontrar mejoras en el diagnóstico y tratamiento de los pacientes que se traduzcan en un incremento de la calidad asistencial.
Biomarcadores para un diagnóstico precoz
Por su lado, el equipo de la UPV, junto con el del Hospital General Universitario de Elche, continúa la búsqueda de biomarcadores selectivos que permitan establecer un diagnóstico precoz sobre la evolución de este tipo de heridas. En esta segunda etapa, el objetivo es mejorar la sensibilidad de los ensayos, para optimizar la predicción de su evolución. En conjunto, la colaboración entre los equipos debe rendir resultados muy interesantes, de aplicación inmediata, como herramienta predictiva de la evolución de heridas de presión infectadas.